Etimología de Masonería

Little Adventures

En la alta Edad Media los trabajadores dedicados al sector de la construcción, los albañiles, eran conocidos como machionis, ya que empleaban andamios (machinas) para desplazarse entre las paredes. A partir de esta denominación inicial se formó el vocablo francés maçon, que equivale a albañil. En castellano se utiliza la palabra masón, mientras que en inglés y en alemán mason.

El germen de la masonería se encuentra en el gremio de los albañiles

En las ciudades medievales los artesanos se agrupaban en asociaciones o gremios. El colectivo de los albañiles o masones recibió una autorización especial: podían trabajar en el territorio Europeo con absoluta libertad de movimientos. En ese momento se convirtieron en francmasones, es decir, «albañiles libres» (en alemán se emplea la palabra freimaurer y en inglés la palabra freemason).

Como cualquier otro gremio de trabajadores, éste fue creado con la intención de autoprotegerse. Albañiles ingleses o freemasons y de otras nacionalidades crearon su propia jerarquía laboral (aprendiz, compañero y maestro) e introdujeron algunas ceremonias de iniciación entre los miembros de su gremio (con estos rituales intentaban controlar el acceso a su actividad profesional). Esta forma de organización gremial teñida de cierto secretismo está recogida en un documento del siglo X, La Constitución de York.

Quienes han estudiado la masonería consideran que este texto medieval constituye su semilla inicial

Sin embargo, según otros enfoques la masonería se remonta al Antiguo Egipto (las primeras tradiciones esotéricas de los egipcios y los maestros arquitectos encargados de la construcción de las pirámides podrían ser las fuentes remotas de las logias masónicas).

En la Constitución de York se incluyen las normas que debían guiar la actividad profesional de los freemasons

El gremio de los freemasons tenía un conjunto de creencias, un código de conducta y una serie de pautas para ejercer la profesión de albañil. En primer lugar, defendían la existencia de un Dios todopoderoso y la obligación de honrarle y respetarle.

Asimismo, proponían una actitud fraternal entre sus miembros. Desde el punto de vista profesional, consideraban que las técnicas de la albañilería debían permanecer en secreto, pero aquellos que formaban parte de la asociación o logia tenían que compartir sus conocimientos.

Estas hermandades de trabajadores eran estrictas a la hora de acoger nuevos miembros (solo se admitían a personas libres que pudieran demostrar su honorabilidad).

Los masones de Inglaterra del siglo X se comprometían a acoger a otros masones del resto de Europa y a darles apoyo en todo lo que pudieran necesitar.

Buscador