El adjetivo verdadero viene del latín verus y éste del verbo veritas, que quiere decir verdad. Así, decimos que algo es verdadero cuando lo consideramos auténtico, sincero y sin ningún tipo de falsedad. Por otra parte, el término amor en castellano viene del sustantivo amor en latín, el cual deriva de la raíz indoeuropea amma, que quiere decir madre.

El problema eterno de la definición

La mayoría de palabras pueden ser definidas con relativa facilidad, pero en el caso de la palabra amor no resulta fácil encontrar una descripción precisa y clara. Esta dificultad obedece a la complejidad de este sentimiento y a su dimensión inabarcable.

La idea de amor está presente en circunstancias muy diversas: en el vínculo emocional de una madre hacia su hijo, en la pasión entre los enamorados, en el sentimiento de entrega y sacrificio hacia alguien o en la pasión por una actividad o una causa.

El compromiso, la intimidad emocional y la pasión son los principales ingredientes del amor verdadero

Existen diferentes formas de calificar el amor, como romántico, pasional, desinteresado, erótico, carnal, platónico, propio o prohibido, entre otras muchas. Cada una de estas etiquetas aporta un matiz singular. Sin embargo, entendemos que el amor verdadero es su dimensión más elevada y sublime. El resto de versiones pueden ser estimulantes e interesantes pero, de alguna manera, de segunda división.

Cinco señales que indican que el amor no es verdadero

– Las mentiras y verdades a medias.

– El sentimiento de posesión por el ser querido.

– Las dudas sobre los propios sentimientos.

– La falta de respeto.

– Las actitudes desconfiadas, egoístas o interesadas.

Síntomas de la fase del enamoramiento

En el inicio de una relación sentimental se producen normalmente una serie de alteraciones emocionales intensas. En este sentido, las reacciones químicas que se producen en el cerebro se parecen a las alteraciones físicas provocadas por algunas drogas.

Los principales síntomas en la etapa del enamoramiento son los siguientes:

– La capacidad de análisis disminuye (este aspecto afecta lógicamente a la valoración de la otra persona).

– Se producen cambios en el estado de ánimo (los tímidos pueden perder su timidez y los atrevidos ya no se sienten tan seguros de sí mismos).

– No se puede evitar el deseo de estar con la persona amada.

– Desde el punto de vista fisiológico hay igualmente una serie de reacciones espontáneas: dilatación de las pupilas, palpitaciones, » mariposas en el estómago «, temblor de voz…

– Si los enamorados tienen que separarse por alguna circunstancia es muy habitual que padezcan una especie de «síndrome de abstinencia».