Formado por dos vocablos surgidos del latín: opinio que significa la acción y el resultado de formar un juicio sobre algo, y público de publicus y populus, que se propone transmitir la idea de aquello que se pone en conocimiento del pueblo.

La auténtica voz del pueblo

Conjunto de valoraciones y consideraciones que emanan de los integrantes de la sociedad, y que son compartidas por una gran mayoría, acerca de los temas de mayor interés que se suscitan en una determinada comunidad: políticos, económicos, sociales.

Las manifestaciones sociales y las marchas, espontáneas u organizadas, son algunos de los formatos más recurrentes que ha usado históricamente la opinión pública para manifestarse, y luego con el desarrollo tecnológico y la explosión de la cultura de masas se sumarían los medios de comunicación masivo.

Un termómetro pre electoral: lo que piensa la opinión pública

A instancias de la política, tanto su manejo como interpretación, reviste una enorme importancia y se la considera la llave hacia el éxito electoral cuando se logra comprenderla y mucho más si se la puede manipular en orden a obtener un resultado exitoso en las urnas.

Claramente esta misión no es una tarea sencilla ni que se suela concretar con satisfacción, sin embargo, hay algunos casos en los que se la ha podido doblegar y dirigir.

Debate y opinión, una alianza histórica

Los miembros de las comunidades tienden naturalmente a debatir todo aquel tema que les resulta de vital importancia para su vida y para el común de la gente, es algo que se encuentra bien asentado en el ADN humano y por caso es que dicha acción se remonta a tiempos remotos, cuando no a la Antigua Grecia, donde el debate era el método por excelencia, promovido en especial por los filósofos a la hora de decidir sobre temas coyunturales que atenían a la sociedad.

Los rumores y la voz del pueblo fueron los antecedentess inmediatos de ella.

Mientras tanto, el concepto se empezó a usar en el siglo XVIII, en pleno auge de la Ilustración, y lo impuso Jean Jacques Rousseau en una de sus obras.

Hoy no hay como antaño prejuicios sociales ni prevalece la idea que solamente los individuos instruidos pueden opinar, mientras que aquellos que no lo son quedaban absolutamente relegados en un segundo plano y debiendo aceptar las limitaciones que su escasa instrucción les imponía.

Los medios de comunicación la exponen y las encuestas buscan predecir su acción

En la actualidad, son la prensa y las nuevas tecnologías los vehículos por excelencia a la hora de transmitir las consideraciones de la opinión pública.

Conocerlas y utilizarlas a favor de un proceso electoral es el desvelo de muchos políticos y asesores de campaña y por eso desde hace un par de décadas a esta parte las encuestas se convirtieron en las herramientas más efectivas cuando se quiere tener una idea bien aproximada sobre las opiniones de la misma y también sobre aquellos temas que la preocupan para justamente plantearles una agenda que los atraiga y los motive a participar.