Se ubica en el griego como chronologia (χρονολογία), una combinación de chronos (χρόνος), que remite a ‘tiempo’, y logia (λογία), vinculado a ‘estudio’, ‘palabra’. Por lo tanto, la etimología de cronología describe ‘el estudio del tiempo’, en el sentido de una secuencia de hechos.

En su origen, se refería a la ciencia de determinar las fechas y el orden temporal de eventos pasados, resultando especialmente importante en la antigua historiografía, donde los autores se esforzaban por establecer una narración coherente y precisa de los acontecimientos. En este sentido, la cronología era tanto una herramienta como una disciplina en sí misma. En la actualidad, el término puede referirse a cualquier orden lógico, de principio a fin, ya sea en el contexto de la historia, la literatura, la vida personal o cualquier otro campo donde el tiempo juegue un papel importante.

En cuanto a los elementos etimológicos, se observa que crono- se encuentra en numerosas palabras que tienen que ver con el tiempo, como cronómetro (dispositivo para medir el tiempo) y cronograma (representación gráfica de una secuencia de eventos). Por otro lado, -logía es un sufijo común que denota un campo de estudio o disciplinas académicas, como «biología» (el estudio de la vida), «geología» (el estudio de la Tierra) y «psicología» (el estudio de la mente), entre otras.